Presidencia de la Nación

Brenda Sardón: “No me imagino una vida sin deporte”

La bolivarense Brenda Sardón se encuentra en plena preparación para la próxima regata que va a estar disputándose en Lucerna, Suiza, el mes que viene. A los 17 años tuvo un accidente que le provocó una lesión medular que la obligó a utilizar la silla de ruedas para trasladarse. Eso no la detuvo en su afán de seguir haciendo deporte y, hoy, representar a la Argentina en competencias internacionales.


La remera paralímpica es un claro ejemplo de cómo enfocar sus dificultades y dar la mejor versión de uno mismo, rompiendo con todas las barreras que se presentan en el camino. Brenda nos cuenta su experiencia, conocimiento y como el deporte, en este caso el remo, la hizo volver a sentirse libre después del accidente.

¿Cómo llegó el paracanotaje a tu vida?

A los 17 años tuve un accidente automovilístico y al año y medio conocí el paracanotaje a través de una amiga que me invitó a un día de campo. Ahí probé por primera vez y me quedé para siempre. Estaba atravesando un momento complicado porque el accidente había sido hace poco y lo que más me gustó fue que salía de la silla y tenía libertad para moverme. No tenía que pedir ayuda para nada y me hizo sentir realmente libre.

Ese mismo día se lo comenté a mis padres y empecé a buscar dónde podía anotarme para hacer paracanotaje. Arranqué en la escuela municipal de Bolívar en enero y en septiembre se hicieron las pruebas selectivas nacionales en la pista de Tigre. Como di el tiempo, arranqué en el equipo.

Durante el año 2013, Brenda participó del Sudamericano en Chile y luego compitió en el Mundial de Duisburg, Alemania, donde finalizó sexta. Los siguientes años fueron de satisfacción plena llegando a asistir a cuatro citas mundialistas hasta el año 2017. El año siguiente el remo aparecería en su vida.

El paracanotaje es un deporte sobre el agua en el que se compite sobre un kayak, de manera individual, y está dividido en tres clases: La A, en la que compiten aquellos deportistas que avanzan mediante los movimientos de sus brazos; la TA donde se puede utilizar el tronco y los brazos, y LTA, donde el deportista puede usar para remar piernas, tronco y brazos.

¿En qué momento surge la idea de comenzar a competir en remo después de tan buena experiencia en el paracanotaje?

En el 2018 tuve mi mejor año en paracanotaje consiguiendo medalla en la Copa del Mundo y ahí sentí que ya era hora de cambiar. Conocí a las boteras de Remo paralímpico y me sedujo esta nueva disciplina. Ahí decidí cambiarme de bando (se ríe). Al año siguiente, 2019, arrancaron los clasificatorios para los Juegos Paralímpicos de Tokio en remo.

Internamente sentía que ya tenía todo el entrenamiento y la experiencia. Me faltaba aprender la técnica ya que estaba acostumbrada a correr postas de 200 metros y ahora me tocaba enfrentar regatas de 2 kilómetros. Nos presentamos en el mundial de 2019 y quedé en el noveno lugar, de la que clasificaban los primeros 7 puestos al juego olímpico. Fue una grata sorpresa y con esa experiencia le metimos fuerte al entrenamiento para los continentales que determinan los demás clasificados y lo conseguí.

¿Qué sensación te dejó Tokio 2021?

La competencia en sí de los Juegos Paralímpicos es muy similar los mundiales, pero lo que marca la gran diferencia es como uno se siente en ese ambiente con todos los deportistas en la villa. La experiencia en Tokio fue alucinante. El compartir comidas, entrenamientos y momentos de esparcimiento son invaluables. Para nosotros, los deportistas paralímpicos era estar en un mundo ideal porque era todo accesible. Los baños, las habitaciones y todo el complejo era como estar en una burbuja. Fueron mis mejores regatas porque hubo un disfrute especial porque ya estaba acá. Me encantó y espero repetir este año.

En su primera actuación de un Juego Paralímpico representando a Argentina, Brenda obtuvo el diploma olímpico, distinción que reciben solamente los mejores ocho atletas de cada disciplina deportiva. Ella logró clasificarse en la segunda colocación de la Final B de la Clase PR1 2000 metros.

Los entrenamientos a primer nivel competitivo son muy intensos y comprometidos. ¿Cómo te llevas con esta rutina de deportista paralímpica de elite y tu vida social?

Me gusta entrenar y me gusta el deporte. Se me dio natural toda la rutina diaria de entrenamientos. Entreno de lunes a sábados con dos turnos de agua y de gimnasio. Ahora incluimos con uno de afloje en la pileta. Las cargas obviamente van dependiendo de la etapa en las que estemos sea de pretemporada o competencia. Por suerte, las instalaciones que nos proporciona la secretaria de deportes son espectaculares ya que nos permite acceder a todos los espacios sin ningún problema. En este momento nos estamos preparando para la regata de Lucerna en mayo y estamos concentrados en poder mejorar en el agua todo lo que vimos el ultimo sudamericano en Rio de Janeiro. Estamos dándole duro al gimnasio con la mente puesta en Paris, pero, paso a paso, apuntándole primero a Lucerna para no enloquecernos.

¿Qué es el deporte para vos?

Siento que el deporte ya es parte de mí. Practico deporte desde los 4 años y agradezco a mis padres que me hayan alentado a hacerlo. Yo hice gimnasia, básquet, atletismo y luego el paracanotaje para llegar hoy al remo. Es algo muy importante y se convirtió en algo trascendental después del accidente porque vi y entendí que es una gran herramienta para poder, en primer lugar, hacer valer nuestros derechos, el de las personas con discapacidad y además el deporte nos educa y nos forma para la vida diaria.

¿Qué significó en tu vida después del accidente que tuviste?

A mí me sirvió un montón después del accidente para poder darme cuenta de las cosas que hay que corregir, tanto a nivel de accesibilidad como a nivel humano de las personas. No me imagino una vida sin deporte, ya sea en el alto rendimiento como de manera recreativa.

Espero que le sirva a todo el mundo, como me sirvió a mí, tener el deporte como herramienta para poder enfrentar la vida que se torna, por muchos momentos, inaccesible.

Scroll hacia arriba